Argentino perdió con Atlas en el primer intento de subir la escalera que lo saque de la D

Argentino perdió con Atlas en el primer intento de subir la escalera que lo saque de la D

Por Javier Parenti (especial para argentinorosario.com.ar)

El primer intento no tuvo éxito. Era algo que podía suceder y no es para dramatizar. Alcanzar el escalón para apoyar el primer pie en forma firme en la Primera D era el desafío de un equipo salaíto que sufrió de ausencias importantes, algo que terminó pagando con la derrota por 2 a 1 ante un Atlas que asoma como candidato al protagonismo. Esto visto desde el resultado, lo que más vale para el hoy. En el juego, mirando un poquito más allá de lo inmediato, no hubo diferencias notorias. Tanto que los dos goles visitantes fueron de pelota parada, algo que sin dudas será un condicionante en cada partido en esta división en la que Argentino juega por primera vez.
Se presumía una presentación complicada. Tal vez más de lo que realmente fue. Ni hablar cuando al minuto Atlas golpeó a las puertas del arco encontrando atento a Luciano Andrada. Pero al toque Fiscella probó desde afuera para que la visita no se la creyera. Desde ahí se vio que había paridad. Todo dentro de un trámite de juego en el que ningún jugador sobresalió, de un ida y vuelta sin vértigo, de pocos cortes, escasas llegadas claras a posiciones de gol y muchas imprecisiones.
Sin embargo, a los 27’ llegó una pelota parada al área que los salaítos no supieron defender y que aprovechó César Rodríguez para mandar al fondo del arco el rebote que dio Andrada tras tapar un cabezazo de Severino.
Como era lógico, Atlas priorizó defender la diferencia y Argentino puso la pelota al piso para intentar darle buen destino con apariciones de Fiscella buscando a los puntas Pons y Mazzía. Y justamente fueron ellos los que estuvieron cerca del empate a los 44’, cuando el arquero tapó el tercer remate hecho por Pons.
Ya en el segundo tiempo, otra vez al minuto, pero en este caso Argentino, asomó al gol con un contraataque que no resolvió bien Fiscella al quedar tres contra tres y priorizar el egoísmo para probar desde afuera, en lugar de habilitar a Morales que entraba solo por derecha.
Y cuando uno deja escapar lo que tiene, se sufre. A los 53’, un tiro libre desde un costado voló hasta la cabeza del Rasta Rodríguez para el 2 a 0 exageradísimo favorable a Atlas. ¿Un golpe insuperable? No. Argentino mostró que tenía fuerzas. Los pibes apretaron y dejaron en claro que estaban preparados para el desafío.
Es cierto que no pudieron, pero dejaron todo intentándolo. Como Pons peleándolas en el área y siendo víctima de un penal clarito que el árbitro Mastrángelo prefirió no ver (56’). Como Morales cuando la cruzó para Alfaro y el hijo del ex 10 de Newell’s de una la metió al medio, a la cabeza de Gonzalo Mazzía para que las cifras se acercaran a un 1-2 esperanzador (66’). Como varias llegadas más que no tuvieron la suficiente claridad que el esfuerzo merecía.
Y fue caída. Desde el primer peldaño de la escalera. Un raspón. Nada tan duro como para no intentarlo con determinación en la próxima fecha. Esto recién empieza.

Fuente: La Capital